El sábado 25 de octubre, estudiantes, titulados y colaboradores de Pastoral Duoc UC participaron en la tradicional Peregrinación al Santuario de Santa Teresa de Los Andes, una experiencia marcada por la fe, la alegría y el encuentro comunitario.
Desde muy temprano, los participantes emprendieron el camino junto a miles de peregrinos provenientes de distintos rincones del país. Fueron horas de oración, servicio y fraternidad, acompañados por el paisaje cordillerano que invitaba a contemplar la presencia de Dios en la creación y en cada rostro que avanzaba con esperanza hacia el santuario.
En esta edición, los Titulados de Pastoral Duoc UC también se sumaron en los equipos de servicio, colaborando junto a la Delegación de la Juventud del Arzobispado de Santiago para brindar apoyo, contención y asistencia a los peregrinos durante toda la jornada. “Peregrinar es un encuentro con Dios. Es imposible no ver en nuestro alrededor el amor de Dios en su pueblo que camina, en aquellos que con fe esperan llegar a la cruz. Vivir la peregrinación es decir: Santa Teresita de los Andes, fuiste fiel”, compartieron desde el equipo de Pastoral Duoc UC.
Para Pamela Grossi, estudiante de la sede Padre Alonso Ovalle, fue una experiencia única: “Esta fue mi primera peregrinación en la vida, y me inscribí sin pensar en cuán extensa o cansadora sería. Solo vi la oportunidad y la tomé. Creo que son esas oportunidades que se presentan por un motivo mucho más grande, donde no hay que dudar y solo creer”.
Por su parte, Anita Buendía, gestora pastoral de la sede San Joaquín, destacó el ambiente de fe compartida que se vivió durante todo el trayecto: “Fue una experiencia maravillosa. Desde el inicio se sintió un ambiente lleno de alegría, cariño y fe. Ver a tantos jóvenes que iban por primera vez fue realmente inspirador. En los momentos de cansancio nos animábamos unos a otros, y al llegar al santuario, la emoción fue indescriptible: cada paso valió la pena. Santa Teresita nos enseña que la santidad está en las cosas pequeñas y en confiar plenamente en Dios”.
La jornada culminó con la Misa de los Peregrinos, celebrada en el Santuario de Auco, donde los participantes agradecieron por el camino recorrido y renovaron su compromiso de seguir caminando con esperanza.
